La actriz reapareció en sus redes sociales el sábado 29 de junio para compartir con sus fans un poco sobre la experiencia que vivió con su bebé. Michelle Renaud reapareció en su cuenta de Instagram para compartir fotografías inéditas del nacimiento de su hijo Milo. Asimismo, abrió su corazón para compartir con sus 5.6 millones de seguidores un poco de la experiencia que vivió durante el parto en agua que eligió y cómo su esposo, Matías Novoa, la ayudó a atravesarlo.
El parto de Milo… la mejor experiencia. Sin duda estuvo retador y tuvo sus momentos muy duros, cada contracción, pensaba, estoy más cerca de besarlo y verlo. El poder recibir a mi bebé en mi hogar con mi esposo e hijo lo hizo aún más mágico”, comenzó. La protagonista de melodramas mexicanos como ‘Ni contigo ni sin ti’ o ‘El color de la pasión’ extendió un agradecimiento a Matías Novoa, quien, según las fotografías, estuvo con ella en todo momento ayudándola a soportar los dolores de un parto natural.
Eres mi mejor todo de vida, no sé qué hubiera hecho sin ti, fuiste mi faro, mi contención, mi lugar seguro, bastaba solo sentir tu mano todo el tiempo en mí para saber que no había lugar a dudas, todo está bien, todo estaba sucediendo en su tiempo y forma, yo siempre con prisa, tú ahí para hacerme respirar y gozar la calma ( de afuera. Finalmente, la artista externó un mensaje en honor a su hijo recién nacido por esta inolvidable experiencia que atravesaron juntos.
“Cuando Milo salió sentí todo el amor, gozo y felicidad del mundo, gracias a Dios pude mantener ese sentimiento hasta el día de hoy sin salir de mi hogar, con esta energía maravillosa que nuestro bebito trae, pude compartir todo momento con Marcelo para que él sepa la maravilla, lo mágico, retador y lo natural que es tener un bebé”, continuó.
News
Encontré a mi hija arrodillada bajo la lluvia, mientras su esposo la castigaba por haber comprado un vestido nuevo. Desde dentro, podía escuchar a su marido y a su familia riéndose. La levanté, pateé la puerta y dije cinco palabras que jamás olvidarían.
La lluvia caía con una fuerza casi horizontal cuando mi coche se detuvo frente a la casa de mi hija….
Acababa de comprar un cottage cuando mi nuera me llamó: ‘Llegamos en dos horas con veinte familiares. Prepara habitaciones y comida; nos quedamos dos semanas.’ Yo solo sonreí… y elaboré un plan.
La llamada llegó justo cuando estaba guardando las últimas cajas en mi recién comprado cottage. Uno pequeño, encantador, perdido en un…
Mi hijo y su esposa me pidieron que cuidara a su bebé de dos meses mientras ellos iban de compras. Pero, por más que lo abrazaba, el pequeño no dejaba de llorar desesperadamente. Algo no iba bien. Cuando levanté su ropa para revisar el pañal, me quedé paralizado. Había… algo increíble. Mis manos empezaron a temblar. Tomé a mi nieto rápidamente y salí corriendo hacia el hospital.
Nunca olvidaré aquella tarde de sábado en Madrid. Mi hijo y su esposa me habían pedido que cuidara a su…
Después de dedicar seis meses a coser a mano el vestido de boda de mi hija, entré en la suite nupcial justo a tiempo para oírla decir entre risas: “Si pregunta, dile que no me queda. Parece comprado en una tienda de segunda mano.” Sentí cómo algo dentro de mí se desmoronaba, pero respiré hondo, levanté la cabeza y me llevé el vestido sin decir palabra. Sin embargo, más tarde sucedió algo que jamás habría imaginado…
Después de pasar seis meses cosiendo a mano el vestido de boda de mi hija, entré en la suite nupcial…
Había entrado fingiendo ser una clienta anónima, con la libreta escondida en el bolso, cuando apareció el mensaje de mi hija, aterrorizada: “¡Mamá, me acusa de robar! ¡Llama a la policía!”. Se me heló la sangre, pero mi respuesta fue firme: “Cariño, escóndete en el almacén. Voy para allá”.
“Había entrado fingiendo ser una clienta anónima, con la libreta escondida en el bolso, cuando apareció el mensaje de mi…
“¡Lárgate de esta casa, vieja inútil!” — La humillación que convierte la hacienda de Joanna en un campo de batalla familiar.
«Como vuelvas a pisar esta casa, te juro que te echo con mis propias manos, vieja inútil.» Ese fue el…
End of content
No more pages to load






