Cuando Anahí se sube a un escenario y las luces se encienden, la nostalgia explota en millones de fans que crecieron con ella al ritmo de “Sálvame” y “Nuestro amor”.
Pero puertas adentro, la historia cambia. Porque la exRBD que lo dio todo en la gira “Soy Rebelde Tour” vuelve a casa y deja de ser la estrella… para convertirse en la mamá de dos chicos que ya se roban todas las cámaras.

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El mayor se llama Manuel, como su papá, y nació en 2017. Dicen que es carismático, divertido y con alma de showman. ¿Casualidad? No. La genética le jugó a favor. Anahí ha mostrado videos donde se lo ve cantando y hasta acompañándola en camerinos.

Pero ojo, no todo es luces y micrófonos: también lo mandan a la escuela, y lleva una vida bastante normal… para ser hijo de una popstar.
Y el menor… ese sí que da de qué hablar. Emiliano llegó en 2020, en pleno sacudón mundial, y desde el primer minuto fue el clon de su madre.

Anahí lo dice y lo muestra: compartió fotos comparando cómo se veían ella y su hijo a la misma edad, y es como si los hubieran copiado y pegado. Tan así que muchos creen que si algún día hacen una serie de su vida, el casting ya está hecho.
Aunque la cantante pasó varios meses lejos de casa por la gira con RBD, se supo que sus hijos la esperaban ansiosos y que preguntaban todos los días por ella.

En una entrevista, Manuel Velasco, el esposo de Anahí, contó que los niños “la extrañan muchísimo”, pero que entienden que mamá está haciendo algo grande.
Y mientras ella cantaba en estadios llenos, ellos también daban su mini show: en uno de los conciertos, uno de sus hijos se subió al escenario e hizo un tierno baile que derritió a todo el público. Sí, los pequeños Velasco Puente ya pisan fuerte.

Ahora, cada tanto, se dejan ver con los hijos de otros exRBD, como María Paula, la hija de Dulce María. Las fotos juntos son un imán en redes, y dan pie a una pregunta que muchos fans se hacen… ¿y si el legado RBD sigue con ellos?
Por ahora, lo único claro es esto: uno ya canta, el otro es el clon de Anahí… y los dos, sin buscarlo, ya están empezando a escribir su propia historia.

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