Nick Hernández sorprendió a muchos al dedicarle un mensaje especial a la madre de su aún esposa, Carolina Sandoval, conocida como ‘La Venenosa’, en medio del proceso de divorcio que los mantiene enfrentados. Este gesto ocurrió poco después de que doña Amalia de Sandoval expresara en redes sociales su descontento con la forma en la que Hernández ha manejado la separación de la presentadora. El contador público aprovechó su cuenta de Instagram el sábado 14 de diciembre para compartir imágenes de un evento navideño en el que participó Amalia Victoria, su hija de 8 años que tiene en común con Carolina.

En la publicación, Nick Hernández mostró su orgullo por el desempeño de su hija en lo que parece haber sido un festival navideño. «Baile de Navidad 2024, lo hiciste espectacular mi princesa hermosa», escribió junto a una ‘selfie’ con la pequeña y algunas fotografías del evento. Lo que realmente llamó la atención fue el agradecimiento inesperado que Hernández dedicó a doña Amalia Sandoval, a la hermana de Carolina, Mariela ‘Pekas’ Sandoval, y al esposo de esta última, Jorge Dokmaji. «Gracias a ‘Pekas’ Sandoval, Jorge Dokmaji y en especial a la abuelita Amalia Sandoval por esta noche inolvidable. Los quiero un montón», expresó Hernández, causando sorpresa por la mención de su exsuegra.

La atención se centró aún más en estas palabras porque horas antes, doña Amalia había arremetido en su contra públicamente. En una publicación de Nick realizada el 12 de diciembre, donde compartió un retrato con su hija, la madre de Carolina comentó duramente: «Tu hija sabrá lo bajo que caíste con una familia que lo que hizo fue ayudarte. Dios te perdone». Estas declaraciones evidencian el quiebre total de la relación entre Nick Hernández y su exsuegra, que alguna vez había sido cordial y cercana, según mencionó en el pasado la misma Carolina Sandoval.

Carolina había revelado anteriormente que la relación entre su madre y su exesposo fue muy buena durante años, pero la separación también trajo consigo una ruptura definitiva entre ellos. El proceso de divorcio no solo ha sido difícil para la expareja, sino que ha generado tensiones y conflictos en todo el entorno familiar. La situación, que sigue desarrollándose públicamente, refleja las complejidades de una separación en medio de una familia que alguna vez se mantuvo unida.