Desde hace semanas, los fans notaban a Angelique Boyer algo distante en redes sociales. Ya no publicaba fotos junto a Sebastián Rulli, y sus mensajes amorosos brillaban por su ausencia. Nadie imaginaba la tormenta que se avecinaba.

Según fuentes cercanas, todo comenzó cuando Angelique descubrió mensajes ocultos en el celular de Sebastián. Al parecer, su pareja tenía una comunicación constante con Ludwika Paleta, con quien trabajó hace años en una telenovela. Los mensajes no eran comprometedores en un sentido explícito, pero sí muy personales. Frases como “extraño nuestras charlas” o “me haces falta” fueron suficientes para que Angelique se sintiera traicionada.

La situación emocional fue dura. Aunque ella y Sebastián no tienen una relación abierta, tampoco había espacio para confidencias con otra mujer, y menos sin su conocimiento.

La actriz enfrentó a Sebastián esa misma noche. Él intentó justificar la situación diciendo que Ludwika solo era una amiga con la que compartía recuerdos y apoyo mutuo. Sin embargo, Angelique no creyó del todo su versión. Se sintió mal por la falta de transparencia, y aún más por la historia que Ludwika y Sebastián compartieron en el pasado. Después del enfrentamiento, Angelique dejó de seguir a Ludwika en Instagram y borró varias fotos con Rulli. En redes, el silencio entre ambos es evidente. Aunque no han anunciado una ruptura oficial, todo apunta a una crisis grave en su relación.