Durante una ronda de preguntas en sus redes sociales, Francisca Lachapel fue sorprendida por una seguidora que le preguntó sin rodeos si se estaba divorciando.

La interrogante llamó la atención por su tono directo y por surgir poco tiempo después del nacimiento de su hija Rafaella, lo que encendió especulaciones entre algunos usuarios sobre una posible crisis matrimonial.

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Con su característico sentido del humor y sin perder la calma, Francisca respondió con una frase muy dominicana: “¡Cancelado! Que su boca y dedos se les hagan de chicharrón”.

De esta forma, negó de manera rotunda los rumores de separación, dejando claro que su relación con Francesco Zampogna sigue sólida.

La conductora aprovechó el momento para enviar un mensaje a sus seguidores, pidiéndoles no dejarse llevar por comentarios malintencionados o rumores sin fundamentos.

Subrayó que no todo lo que circula en internet refleja la realidad de su vida personal.

Cuando se encontraba esperando a su tercer hijo, Francisca volvió a hablar del tema.

Dijo que entiende que las figuras públicas están expuestas a todo tipo de comentarios, pero insistió en que muchas veces se hacen afirmaciones dañinas sin pensar en las consecuencias.

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