En una conversación sincera y cargada de anécdotas personales, el influencer conocido como Caramelo compartió con el Rey Grupero parte de su historia de vida que pocos conocían.

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Entre risas y recuerdos, reveló que, aunque no nació en Puerto Rico, se siente “mitad boricua” por una razón muy especial.

Su padrastro es puertorriqueño, y fue él quien tuvo un papel crucial en su vida y en la de su madre.

Caramelo explicó que su padrastro no solo fue una figura paternal para él, sino también el hombre que los ayudó a salir adelante y a construir una nueva vida en Estados Unidos.

Según contó, fue gracias a él que lograron dejar atrás muchas dificultades en su país de origen y establecerse en suelo norteamericano, en busca de mejores oportunidades.

“Él fue el que nos sacó del barrio y nos llevó a vivir al norte. Por eso yo digo que soy mitad boricua”, expresó entre sonrisas.

Más allá de lo legal o biológico, para Caramelo la identidad va más allá de la sangre: se trata de gratitud, de conexión emocional y de reconocer a quienes estuvieron presentes en los momentos clave.

Durante la charla, también compartió cómo adoptó costumbres puertorriqueñas gracias a la influencia de su padrastro: desde la comida hasta ciertas expresiones del idioma.

“En mi casa se escuchaba salsa, se comía arroz con gandules y hasta se celebraban fiestas como si estuviéramos en la isla”, comentó.

Este relato mostró una faceta más humana de Caramelo, muy distinta a la que suele proyectar en redes.

Y dejó claro que, para él, la palabra “familia” tiene un significado mucho más profundo que lo meramente biológico.

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